Con fundamento en los principios de buena fe, transparencia, capacidad real de pago y progresividad en la recuperación económica, el suscrito propone a sus acreedores el siguiente plan de pago, que refleja su disposición voluntaria y honesta de cumplir sus obligaciones conforme a su situación económica actual y proyecciones razonables de mejora:

PRIMERA: Se propone la posibilidad de entregar en dación en pago aquellos bienes que puedan contribuir a reducir el saldo adeudado, considerando el valor comercial de los mismos y las disposiciones legales aplicables para salvaguardar los derechos de todas las partes.

SEGUNDA: Se plantea la compensación de recursos retenidos o depositados a favor de los acreedores, a fin de saldar parcial o totalmente las obligaciones respectivas, de acuerdo con la normativa vigente y garantizando la equidad entre los diferentes acreedores.

TERCERA: Se establece una cuota mensual de recuperación, calculada con base en la capacidad de pago actual del deudor, cuya distribución se hará conforme a la prelación legal y las pautas acordadas en el proceso de insolvencia.

CUARTA: Una vez concluido el periodo de reorganización pactado, el deudor continuará con el pago de las obligaciones que tengan un plazo mayor, manteniendo su compromiso de cumplir con los acuerdos y ajustando las cuotas en la medida en que su situación económica evolucione favorablemente.

QUINTA: Cuando existan fondos solidarios o aportes especiales retenidos por las entidades acreedoras, se solicita que dichos recursos sean aplicados como abono o compensación directa a la deuda, evitando la duplicidad de retenciones y contribuyendo al fortalecimiento de la masa pasiva.

Nota 1: Se solicita a los acreedores la consideración de una condonación parcial de intereses, tanto corrientes como de mora, como muestra de buena fe y para facilitar el cumplimiento efectivo del plan de pagos.

Nota 2: Esta propuesta se realiza bajo el principio de transparencia y voluntad de pago. El deudor deja constancia de su intención de aumentar los aportes en la medida en que su situación económica mejore, a fin de promover una solución integral y equitativa.

Salvedad sobre el sacrificio de bienes esenciales: Se reconoce que este plan implica un esfuerzo significativo por parte del deudor, quien en algunos casos podría verse obligado a reducir gastos destinados a necesidades básicas. No obstante, se mantiene el compromiso de priorizar sus obligaciones sin renunciar a los derechos fundamentales ni al sustento mínimo vital.